Seguro que, con un poquito de esfuerzo, podrían decir el nombre de cada uno de ellos, a qué se dedican (iba a decir "en qué trabajan", pero sería prestarse a un chiste demasiado fácil, ¿verdad?) y hasta cuál es su equipo de fútbol favorito. Y, echándole un poquito de imaginación, hasta podrían decirnos que el de la izquierda
es muy poco práctico, que tiene pensamientos idealistas y habilidad para las relaciones interpersonales. Además, el presidente del Gobierno delega poco y tiene problemas para crear equipos.
Mientras que el de la derecha
tiene gran capacidad de adaptación, intuición y sentido de la previsión. Sin embargo, su rostro también transmite inseguridad, desconfianza y pereza.
Lo cual puede ser cierto o no, claro, pero al menos responde bastante bien a la imagen pública de cada uno de ellos.
Bueno, pues esto lo podemos decir ustedes, o yo, o el tipo que acaba de pasar por la calle paseando al perro, y la cosa no tendría mayor importancia. Pero para la revista Tiempo, por lo visto, es una proeza tan notoria que merece dedicarle un (publi)reportaje con este llamativo titular: Tiempo descubre la cara oculta de Zapatero y Rajoy.
¿Y por qué motivo? Pues porque esa sarta de obviedades las dice nada menos que un morfopsicólogo.
Para quien no esté al tanto, la morfopsicología pretende deducir las características psicológicas de una persona a través de su rostro. Y no me refiero a que vean a un tipo con cara de cabreo y deduzcan que está enfadado, no: se trata nada más y nada menos que de elaborar un perfil psicológico acerca de la forma de la nariz, el arqueo de las cejas, la prominencia de las orejas y, en fin, cualquier otro rasgo que se le antoje al "experto" de turno. Porque, por supuesto, se trata de eso, de un antojo, una creencia sin la más mínima base real.
Lo cual no tendría la menor importancia si se dedicasen a ejercitar su pseudociencia, no sé, en una feria, al lado de los puestos de tarot y quiromancia y junto a la máquina de la gitana con una bola de cristal que te lee el porvenir echando una moneda. Pero la cosa se pone mucho más seria cuando leemos, como en el reportaje de marras, cosas como que la morfopsicología es
una valiosa herramienta para determinar, por ejemplo, si una persona sirve para desempeñar un determinado trabajo o incluso si puede ser un buen marido o una buena esposa.
Y
Una técnica que se puede aplicar en niños y jóvenes para corregir ciertas actitudes y orientarles hacia lo que están capacitados, en los estudios o en futuros trabajos. De hecho a la consulta que este morfopsicólogo tiene en Barcelona acuden muchos padres con sus hijos para que analice sus rostros y les oriente en su formación y las actividades para las que pueden resultar más aptos. Esta ciencia está empezando a utilizarse también en algunas empresas como forma de selección de personal, como coach en la evaluación, configuración y cohesión de equipos de trabajo para que sean más competitivos o en la identificación de talentos dentro y fuera de la empresa.
Porque esa es otra: al igual que pasa con la grafología o incluso la astrología, la morfopsicología está siendo utilizada como si se tratase de un método psicológico real, para el tratamiento de niños con problemas o para la selección de personal. Vamos, que uno se arriesga a perder un empleo sencillamente porque al tipo que hace la selección no le gusta su cara en conjunto o algún rasgo de ella, como la nariz.
Hace pocos meses el diario El País también publicó un reportaje sobre esta misma pseudociencia (de hecho, con el mismo experto, Julián Gabarre), como nos contó en su día Luis Alfonso Gámez. Y como escribió Irreductible,
Es más, creo que el artículo que este domingo ha publicado Juan José Millas roza ya la tomadura de pelo. Bajo el título "El rostro del poder" el galardonado Millas sonroja a cualquiera que tenga dos dedos de frente, haciendo uso de la morfopsicología para analizar la personalidad de algunos personajes históricos... La morfopsicología!!... Una pseudociencia basada en adivinar el carácter de alguien por los rasgos de su cara!... Bochornoso.
Bueno, pues estamos en las mismas. Si Tiempo cree que la morfopsicología puede llegar a tener alguna validez lo tiene muy fácil: que ponga a Juan Gabarre a "adivinar" el perfil psicológico de personas anónimas, bajo la supervisión de verdaderos expertos que puedan determinar si sus "diagnósticos" son reales o simplemente se basan en generalidades y vaguedades. Pero que
Aparte de Zapatero y Rajoy, Gabarre publica esta semana en TIEMPO su análisis sobre otros personajes como Penélope Cruz o David Villa.
Es, por parte del "experto", echarle un morro que se lo pisa. Y por parte de la revista demostrar bastante menos capacidad de discernimiento que el pulpo Paul. La personalidad no reside en la cara, sino en el cerebro. Órgano que, señores de Tiempo, conviene usar de vez en cuando.
"está siendo utilizada como si se tratase de un método psicológico real"
ResponderEliminar¿Y qué "método psicológico" es real? Porque llevo años intentando que un psicólolo no psicoanalista me explique en qué aplastante evidencia se basa el estudio de la psique y qué cojones es eso de la psique. Al final, con los "mejores", siempre termino concluyendo en que ya existe la neurobilología y la etología para estudiar comportamientos como ciencia.
No hablemos de los sin oficio ni beneficio de los comecocos de RRHH que llevan haciendo la pascua a los trabajadores, con o sin morfopsicología, desde hace mucho tiempo. Y ya la conocían desde antes: "Esta no que es muy fea".
Por cierto, mi polla tiene un ligero arco descendente cuando me empalmo, ¿significa que soy un poco tímido? Que vengan a comprobarlo.
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarNo, hereje, el arco que describe tu pene simplemente describe el movimiento de tu mano al masturbarte.
ResponderEliminar(Tranquilo, nos pasa a todos)
Saludos.
@Hereje Blasfemo: No sé qué clase de psicólogos conoces, pero el estudio de la mente humana por parte de la psicología está basado en evidencia empírica y es real. Lee cualquier libro de historia de la psicología y te enterarás.
ResponderEliminarEl término "psique" significa "alma". Obviamente hoy en día la psicología no estudia el "alma", sino la mente, que según la RAE es: Conjunto de actividades y procesos psíquicos conscientes e inconscientes, especialmente de carácter cognitivo.
Que esos procesos psíquicos tengan una base biológica no impide que existan como tal.
En cuanto a que otras ciencias estudien la conducta y algunos aspectos de los procesos cognitivos te contesto que una ciencia no sólo se caracteriza por el objeto de estudio, sino también por la perspectiva desde la que aborda ese objeto de estudio. Por eso existen tantas ciencias, y todas son válidas y necesarias para llegar a una correcta comprensión del tema. Según tu posición deberíamos quedarnos con biología, física y poco más, ya que todo se puede reducir a eso.