21 de abril de 2010

Timopulseras: la lección de la OCU y la lección de Facua.

Puede parecer bastante extraño que, como contaba Kurioso el otro día, la OCU no tenga reparos en exponer públicamente el timo de las dichosas Power Balance, y casi al mismo tiempo otra gran organización de consumidores, Facua, anuncie que ha denunciado ante las autoridades de consumo a la empresa que comercializa un cachivache similar, Ion Balance. Extraño, entre otras cosas, porque ambas asociaciones tienen razón: la OCU al quejarse de la lentitud e ineficacia de los sistemas de control de este tipo de engañifas (ya lo decíamos también en su momento desde Círculo Escéptico), y FACUA en los argumentos jurídicos que avalan sus denuncias. Y aclaro: son los mismos que ponía yo por aquí hace unos días, pero no porque yo tenga nada que ver con FACUA ni ellos conmigo; simplemente porque esa es la realidad normativa que tenemos.

Tenía razón el Director de la OCU porque, lamentablemente, esos mecanismos legales no funcionan. En la mayoría de los casos las denuncias administrativas parecen ser ignoradas sistemáticamente, y en los pocos en los que se produce alguna sanción, esta resulta como mínimo ridícula. Por ejemplo, hace algunos días la Agencia Catalana de Consumo impuso una sanción a la empresa comercializadora de un brebaje llamado Alcohol Killer. El motivo fundamental de la sanción era, al parecer, que la compañía publicitaba el producto asegurando que posee una serie de propiedades... vale, sí, milagrosas entre las que destacaba la de reducir la concentración de alcohol en sangre de sus consumidores, incitando de este modo al consumo irresponsable de alcohol. Vamos, como esto que todos podemos seguir viendo en su web:



Para más coña marinera, la sanción económica impuesta es de 10.000 euros. Teniendo en cuenta que el brebaje se vende a 17 euros el pack de 6 latas de 250 cc, la multa supone el precio de algo menos de mil litros del producto. Que seguramente es lo que venden en un solo botellón, y de los pequeñitos.

En el blog de Kurioso, el Director de la OCU contaba también otro problema serio. Cito:

El tema de la publicidad es muy importante. Los medios no ayudan a fomentar esa credibilidad, recuerdo un estudio que presentamos un día para una cadena de televisión sobre la polémica de las ‘leches omegas’ y su enriquecimiento. Esa misma tarde llamó la redactora del programa a la OCU, casi llorando. Tenían que hacer un contra-comunicado donde, sin decir lo contrario, por lo menos se suavizara el contenido del desprestigio. Había llamado la casa comercial amenazando con retirar la publicidad a la cadena.

No es una anécdota aislada. Ponga la radio a cualquier hora y en casi cualquier emisora y probablemente se encontrará con algún anuncio de, por ejemplo, esta empresa



dedicada, como pueden ver, a la comercialización de todo tipo de productos, unos legítimos y otros, la mayoría, bastante cuestionables. Un día de estos les hablaré de alguno de los inventos (en el más estricto sentido de la palabra) que nos ofrecen.

Así que, claro, quien desee denunciar estos timos no es que no vaya a encontrar ayuda en muchos medios de comunicación; es que directamente se enfrentará a su hostilidad, porque su publicidad supone un buen pellizco de sus ingresos.

Un panorama como para desanimar a cualquiera, ¿verdad?

Pues no. Por supuesto que no.

En primer lugar, y en esto el Director de la OCU debería tomar ejemplo de Facua, las organizadores de consumidores existen, se supone, para defenderlos. Por difícil que sea. Ya sabemos que las autoridades de consumo probablemente no hagan nada (ahí tenemos, sin ir más lejos, el ejemplo de la Agencia Española de Medicamentos y la homeopatía), pero si las asociaciones se rinden antes siquiera de intentarlo, la verdad, no sé para qué las queremos. De hecho, estas situaciones podrían servir también para denunciar, de forma indirecta, esa inactividad de las autoridades de consumo.

Y, por otro lado, el problema de los medios "cautivos" de la publicidad tampoco es excusa. Al fin y al cabo, en el ejemplo que ponía el Director de la OCU no había ninguna denuncia administrativa de por medio, sino tan solo un estudio presentado, supongo, en rueda de prensa. Si las asociaciones de consumidores tienen que estar pendientes de que los medios de comunicación aprueben o no sus acciones, estamos en las mismas que antes: ¿para qué nos sirven? De hecho, desde un punto de vista cínico, probablemente pueda tener más repercusión en los medios la interposición de una denuncia contra la empresa que vende las pulseras Timo Balance ® que limitarse a mostrar un estudio que nos diga que no sirven para nada.

Porque hay un tercer factor que la OCU debería tener en cuenta (y que no sé si Facua ha incluido o no en sus cálculos, pero bien pudiera ser). Nos reímos mucho con esto de la timopulsera, y a veces pensamos que para comprarse semejante cachivache hace falta tener el cociente intelectual de un ladrillo caravista (me refiero, claro, a un ladrillo que hubiese recibido un fuerte golpe en la cabeza cuando era pequeño), pero no todos los que la llevan son unos completos majaderos, ni mucho menos. Los hay quienes lo hacen simplemente por moda... bueno, sí, esos también son majaderos. Pero además hay personas normales, incluso inteligentes, que las compran porque realmente creen que sirven para algo.

Y lo creen, sencillamente, porque solo han recibido propaganda directa (de los vendedores) e indirecta. De los famosos que llevan la pulsera, o de los medios que hablan de ella sin el más mínimo sentido crítico). O incluso de otros usuarios, convencidos de buena fe de la utilidad del chisme. Y no solo por el efecto placebo que pueda provocar, sino también por la forma en que los seres humanos evaluamos este tipo de cosas: al fin y al cabo, a todos nos gusta hacernos ilusiones, y además es muy difícil ser objetivo cuando uno se enfrenta al dilema de creer que algo hará el chisme o bien tener que admitir no solo que le han timado treinta y tantos euros (o cincuenta, o setenta...), sino que encima lo está proclamando a los cuatro vientos cada vez que sale de casa con su pulsera puesta.

La información rigurosa y crítica sobre estos timos es muy escasa, y por eso mismo merece la pena emprender cualquier medida que pueda ayudar a divulgarla. Incluyendo la interposición de denuncias administrativas. ¿Que van a ir a parar al mismo cajón sin fondo al que han ido tantas otras? ¿Que las autoridades, si hay suerte, las resolverán dentro de cinco o seis años, cuando las pulseras hayan pasado al olvido sustituidas por el timo de moda en ese momento? Pues sí, es lo más probable. Pero quizá así se pueda conseguir que alguna de esas personas que solo saben que "las usan los deportistas de élite", que la lleva un exconcursante de "Gran Hermano" que sale mucho en la tele o que a la vecina del tercero le sienta de maravilla, y que además ni son suscriptores de las publicaciones de las organizaciones de consumidores ni suelen visitar sus páginas web, oigan otra versión. Que esas organizaciones las denuncian como un timo, que los estudios han demostrado una y otra vez que sus efectos sobre el organismo son los mismos que los de atarse un cordón de zapato viejo a la muñeca, y que la cosa, tal vez, no sea tan bonita como se la intentan vender desde todos lados.

Que es, al fin y al cabo, lo que también intentamos hacer los escépticos. Los auténticos convencidos, quienes voluntariamente han decidido prescindir de su sentido crítico para creerse la superstición de turno, difícilmente van a entrar en razón por mucho que se les argumente. Y quizá tampoco lo consigamos con los indecisos. Pero, al menos, que sepan que no todo el mundo está dispuesto a tragarse esas cosas. Que sepan que muchas veces donde hay humo lo que hay es eso, solo humo.

Así que ya ven: la OCU nos ha dado una lección acerca de lo difícil que es hacer algo contra estos timos. Pero me quedo con la que nos proporciona Facua: por difícil que sea, por inútil que parezca, hay que intentarlo. ¿No les parece?

14 comentarios:

  1. Anónimo2:36

    Hay un detalle importante que te dejas,Fernando:

    La denuncia de FACUA es más viable porque se trata de una mala copia de la timopulsera de una empresa española (no americana) que ha olvidado ser más sutil con los principios terapéuticos. ¿Curar el cáncer? ¿mantener la juventud?... lo llevan claro en la ronda de descargo

    Veo que ya han 'reculado' en su web, pero esto confirma que incluso para copiar fraudes somos bastante malos...

    Saludos y gracias por la cita.

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  2. Muy bien por parte de la OCU. Pero, y me voy por la tangente, ¿es de recibo que esa organización de consumidores y usuarios inunde de spam muchas direcciones de email?

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  3. Anónimo14:04

    Ahora que TVE ya no depende de la publicidad, estaría bien que dedicasen algún espacio en su programación para evitar la proliferación de estos timos.

    Por ejemplo desde los programas estos que hacen de salud, que tantas personas mayores ven.

    Saludos

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  4. Yo creo que hay otro grupo de personas que compran esos productos y son la gente que esta ya desesperada con problemas de salud y se agarran a cualquier cosa, a la mínima oportunidad... y no es que sean tontos ni ilusos.

    En esos casos me da más pena que les timen así.

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  5. Anónimo19:24

    Y después deberían quitar todos los anuncios que no estén soportados por al menos tres artículos en Nature, como por ejemplo "ponte Axe y conquístalas a todas", "conduce Opel y serás el más joven", "lotería de navidad, aquí toca", "barça/madrid, el partido del siglo", "vota pp/psoe/ciu y saldrás ganando", y demás chuminaderías.

    La publicidad siempre intenta vendernos algo y muchas veces con mensajes falsos o discutibles. Si nos los creemos como consumidores soberanos pues allá nosotros. Pero no acabo de estar de acuerdo con que prohíban los anuncios que no sean hechos científicamente demostrables, porque de esos hay tres y todos son de documentales de La 2.

    Si ponerte un anillo de brillantes te hace más guapa, exitosa glamurosa, feliz y en definitiva más mejor (y así nos lo venden sin que nadie se escandalice), no entiendo por qué no va a poder hacer la misma publicidad una pulsera de plástico con un holograma. Tiene los mismos argumentos científicos, vamos.

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  6. Anónimo19:56

    Me pregunto, qué pasó con las pulseras que tenía una bolita en cada extremo y que incluso se vendían en las farmacias...

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  7. Anónimo22:10

    Se os ha olvidado otra pulserita la "Energy Balance" que vende "Ramiro" en Publipunto Intershoping http://www.publipunto.com/productos/energy-balance/ con las que nos marea (sobre todo en fines de semana y vacaiones) en sus "Pseudo-entrevistas" en emisoras de radio como "Onda Cero" "SER" "Punto Radio" y creo que hasta en la "COPE"

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  8. Anónimo0:52

    Sr. Frías:
    Las timopulseras son eso, un timo. Como otros muchos. Mire le pongo un ejemplo: la iglesia católica. ¿A qué no hay huevos de llamarles majaderos?
    Por favor, un poco más de respeto y menos perogrullo que parece que es usted el inventor de la pólvora.

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  9. - Kurioso, eso es cierto. Pero también podría haber sido una buena táctica por parte de la OCU, creo yo.

    - Carlos, sí tienes razón. Aunque personalmente a mí me deprimen más los de Legálitas preguntándome si necesito abogado X-DDD

    - Fisilosofo, la verdad es que es una buena idea. Y como la idea es buena, me temo que no lo harán, al menos hasta que no terminen de quitarse del todo la mentalidad comercial.

    - Ruisan, eso es cierto, pero si te das un paseo por el blog verás que me dedico bastante a esos timos.

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  10. -Anónimo 1 (caramba, aunque no tengáis identidad de Google y demás, podrías firmar con un pseudónimo para no liar las contestaciones): una cosa es el lenguaje publicitario, con sus exageraciones y sus reclamos, y otra muy distinta mentir por todo el morro. Y hacerlo, encima, en una propiedad esencial del producto: estas pulseras no se venden porque sean más o menos bonitas (a mí al menos no me lo parecen), sino por sus supuestas propiedades milagrosas. Si estas propiedades no existen, como es el caso, la publicidad es engañosa y el producto un timo. Por eso creo que la comparación con las joyas (o, ya puestos, la ropa de marca o los artículos de lujo) no es correcta: nos guste o no, la realidad es que estos productos confieren apariencia de estatus social, y que yo sepa nadie los vende asegurando otra cosa.

    - Anónimo 2: en aquel caso sí que hubo varias sanciones e incluso condenas judiciales (algunas de ellas gracias a la OCU, por cierto). Además, imagino que acabarían pasando de moda, aunque todavía hay quien las vende.

    - Anónimo 2: No se me ha olvidado: una de las empresas que cito en el texto (y de la que hablaré un día de estos) es precisamente Publipunto.

    - Anónimo 4: también tengo que recomendarle que se pasee por el blog, y lea entradas como por ejemplo esta o esta otra, con la que por cierto me divertí mucho mientras la escribía. No he inventado la pólvora, pero el hecho de no hablar (o que usted crea que no hablo) de unos majaderos no tiene por qué impedir que hable de otros majaderos. Y en cuanto al respeto, como decía mi abuela, es algo que hay que ganarse, y esta clase de timos no lo merece, ni mucho menos.

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  11. Caso real, muy cercano, yo mismo. 26 años, sano, y bastante escéptico en la mayoría de las situaciones salvo que me demuestren lo contrario.
    Por circunstancias mi padre trajo una pulsera de esas a casa y nos dijo si queríamos probarla. Sin mucho convencimiento me la puse esperando convencer a mi padre para que la devolviera y recuperase los 35 euros que cuesta la dichosa pulserita.
    Pero hice un par de pruebas, la de la flexibilidad y la del equilibrio y fue un poco extraño darme cuenta que tras repetir las pruebas durante una hora se cumplía siempre que llevando la pulsera tenia más resistencia y flexibilidad que sin ella.
    De que evite enfermedades y aumente la concentración no hablo, pero ya no me rio de quien la lleva puesta. Solo quiero decir para escribir un articulo así, espero que hayas probado antes el producto, porque entre tantísimo humo, si sale algo solido, te lo vas a perder.
    Y por ultimo, si alguien tiene información de las pruebas que han hecho en la OCU, me encantaría que pusieran algún enlace, porque no me cuadran las prueban que hayan hecho.

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  12. Anónimo15:44

    Todo es mucho más simple y es que el quiera se la compre y el que no crea ni confíe que no se la compre y deje de dar esas opiniones sin fundamento que más bien el fondo que tienen es que le da rabia no estar él vendiendo esas pulseras.
    También veo raro que tanta gente que ha comprado la pulsera sea tonta o tengan todos efecto placebo??los únicos que critican la pulsera son los que no la han probado y les da miedo probarla por si le funciona... la gente creo que es inteligente y hoy en día no se gastan 35 Euros en una pulsera así por así, habría que investigar el porqué se lo gasta la gente, tanta gente, tantísima gente y más aún que se lo gastará...

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  13. Anónimo13:21

    Creo ke hablais sin haberlas probado!! yo me compre una a traves de su pagina web y en ningun momento decian lo ke denuncia Facua, solo explicaban ke ayuda a mejorar la flexibilidad, el equilibrio... y tengo ke decir ke yo estoy muy contenta!!
    kizas soy una majadera, pues viva porke desde ke la tengo duermo mucho mejor!!
    kizas sea un placebo, pues no los se pero a mi me sirve..asi ke no se de donde se ha sacado Facua tal publicida engañosa!!

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  14. Anónimo13:24

    @kanedaki:
    Con o sin pulsera, si haces ejercicios de flexibilidad durante una hora, verás que mejoras, porque calientas los músculos.
    Sobre lo de que siempre mejorabas con la pulsera puesta: ¿Lo anotabas en un papel? Porque la sugestión pasa malas pasadas. :P

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